martes, 3 de junio de 2008

LA COLUMNA DEL CHAYO

Hoy la cuarta entrega de la columna llega en un momento complicado del equipo y la misma nos enseña como vivir esta corta vida, Gracias Maestro:

Se acuerdan el día que nos toco tomar las palabras enfrente de un trofeo inmenso?
Un día inolvidable que voy a llevar para siempre en mis retinas, me acuerdo de muchas cosas que se dijeron, sobre todo de la unión del grupo, que desde hacia un tiempo venia convencido de que el objetivo no era ni mas ni menos que darse uno de los gustos mas grandes de sus vidas, así lo sentía yo, partido tras partido nos hacíamos mas fuertes, cada uno sabía que tenia que dejar la pierna por el otro en post del objetivo.
Y quiero explicarles que me sale de adentro cuando cada sábado es la hora de salir de casa.
Se habrán dado cuenta que estoy loquito, así que partan de esa base.
Hace mucho tiempo que pienso que somos todos una manga de mercenarios, vendemos lo más preciado, nuestras vidas, sueños, libertad, por unos dólares mugrosos, y una vez que logramos un cierto bienestar, no somos sabios para salir, pues queremos ir por todo.
Si lo mas valioso es el tiempo, en conclusión, lo material pasa a segundo orden, o sea que es mas fácil dar de lo material, y es mucho mas difícil regalar tiempo.
Entonces, salgo de casa con mi mochila, trajeado, a disfrutar de uno de los únicos momentos de mi semana que son totalmente desinteresados, y por supuesto me enfermo la cabeza por disfrutarlo alocadamente, porque un día esa señorita enamorada que me respira en la nuca desde el comienzo, y que vive coqueteando, me dará el beso que marque el fin, y que nos vamos a llevar?
Desde esta columna entonces, les pido que volvamos a la forma de ver el sábado que teníamos el año pasado, que volvamos a enloquecernos por el objetivo, y que disfrutemos de la pasión que nos genera todo esto, todavía estamos cerca de poder repetir.

No hay comentarios.: