Un nuevo desafió vivía El Vasco el último sábado. En un torneo muy parejo enfrentábamos al último del certamen pero sabíamos que sería duro. Dany no podía asistir al compromiso, por eso un viejo conocido como Jorge tomaba las riendas del equipo para mantener al mismo en este arranque arrollador. Así la charla técnica fue extensa, Jorge se reencontraba con sus players y los motivaba para no dejar pasar el tren de un nuevo triunfo.
La cancha era impresentable, en la semana habíamos sido programado en la mas linda pero por un problema de The Fútbol Company términamos en la peor. Mas allá que el Vasco no se queja y juega donde lo tenga que hacer, eso hizo que el primer tiempo fuera chato, la pelota se iba mucho afuera (no había alambrados) y prácticamente se jugaron 25´, no mas. El rival era un equipo joven de juego intenso y áspero. Así el cotejo se hizo friccionado con algunos golpes de más. Para colmo Mauro se esguinzó su tobillo y a los 20´tuvo que salir.
Rearmamos el fondo con el Cabe, que jugó un gran partido, y de a poco nos fuimos acomodando.
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| Jorge pensativo en su vuelta como DT, disfrutando del triunfo de su equipo |
No había prácticamente llegadas a los arcos, la única clara la había tenido el Mono al minuto de juego pero su remate cruzado salió desviado. Así en el último minuto de primer tiempo, Moli se aviva ante un error de la defensa rival, le cometen foul en el borde del área y Juan no falló, la clavó con fuerza al palo del arquero. 1-0 y a descansar.
En el entre tiempo ingresaron Belu x Pipi y Chayo x Negrito.
Ese gol hizo que el trámite cambie. Comenzamos a manejar la pelota y nuestros dos delanteros estaban afilados.
Juan jugaba un partidazo y se entretenía con Moli por el lado izquierdo. Así llego el segundo, un golazo, doble pared entre Mono y Belu sobre la derecha, este último la abre al centro del campo para Juan, que se saca de encima a un rival y pone a Moli mano a mano del nro. 1, Moli define por arriba, la bocha pica pega en el travesaño y el Mono en posición mas que dudosa pone el 2-0. El partido estaba casi definido, el nerviosismo copaba a nuestro rival y El Vasco aprovechaba los espacios. El Vasco esta maduro, es paciente y sabe a lo que juega. Es como esos boxeadores que llevan el ritmo de la pelea y en el momento menos esperado pone el golpe de nocaut.
Así tras otro arranque de Juan este la abre para Moli que entre dos habilita nuevamente a Juan quién abre el pié derecho y la acomoda contra el palo. Doblete del 8 (creo que el último había sido contra Mela-Mela en el año 2000 jajajja). Así se fue el partido con un Vasco firme. Un Coco corriendo a todos y sin sufrir jugadas de riesgo en contra. Al rato nos enteramos que todos los demás equipos jugaron para nosotros y sacamos una distancia tremenda de 8 puntos la cual deberemos mantener matándonos sábado a sábado.
Jorge se fue feliz porque el equipo le respondió y puede contarle al DT que El Vasco esta otra vez para grandes cosas.
Vamos Vasco por una nueva corona, pero a no gallinear, paso a paso. Huevos, fútbol y corazón.
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